Qué extraño, un profundo sueño donde eran noqueados por un jounin de su aldea era lo que estaban viendo mientras dormían. Aunque pronto su sueño sería interrumpido, algunos por un graznido, otros recibirían un picotón y otros quizá sintiera que algo se movía a su lado. Despertando de manera sobresaltada verían quizá una escena escalofriante para despertar y es que estaban rodeados de pingüinos en un ambiente ártico totalmente gélido ¿Qué estaba pasando ahí?

Fuera como fuera los pingüinos no eran la principal preocupación, si no el hecho de que no estaban en tierra firme, estaban sobre un gran bloque de hielo rodeado de agua, helada por si tenían la curiosidad de nadar. A un par de metros había bloques flotando, parecía que marcaban un camino peligroso pero viable para llegar a tierra firme. La cual parecía la mejor opción, eso o morir congelados en aquel sitio pues poco a poco la corriente arrastraría aquel hielo mar adentro.

Antes de que emprendieran el camino, un pingüino les llevaría algo curioso: un pergamino sellado con el símbolo del kanji del agua, pero al abrirlo descubrirían que estaba completamente en blanco, sin embargo, la mirada del pingüino les hacía saber que era algo importante.

Y despertamos, cómo?, no tenía idea alguna pero lo que pasaba era demasiado extraño; por alguna razón un jounin de mi propia aldea me noqueó, la razón aún era desconocida pero no debía ser algo bueno. Al paso del tiempo desperté en un lugar distinto, frío, con hielo por doquier y lo más importante de todo...rodeado de pingüinos. Observé a mis lados para ver si había alguna señal de alguien o algo, sólo noté que también se encontraba conmigo un miembro de konoha. Ahora, tendría que pensar muy bien la siguiente jugada, no sabía lo que pasaba y cualquier movimiento erróneo que hiciera podía ser fatal. Qué está pasando aquí?, porqué estoy en un lugar como éste... Mencioné mientras me dirigía hacia el otro jóven que estaba al lado mío. Oye, ey!, despierta, no es hora de dormir.. En una jugada peligrosa pues no podía asegurar que fuera de mi villa, a pesar de tener la insignia de konoha fácilmente podía ser un impostor, de cualquier manera, no había muchas opciones, el tiempo pasaba y debíamos actuar rápido.